Beveren es un municipio de 49.000 habitantes en la provincia belga de Flandes Oriental. Alberga el Waaslandhaven, parte esencial del puerto de Amberes. El puerto atrae mucho comercio y transporte marítimo, pero también repercute en el tráfico de la comunidad local

Los camiones, y un número creciente de coches, utilizan atajos a través de las zonas residenciales de Beveren para evitar el tráfico pesado. El aumento de las obras viales en la zona, incluyendo el gran proyecto Oosterweel, hacen que esta situación no se resuelva en los próximos años. Por eso, en 2020, el consejo municipal decidió tomar medidas. Para mantener el flujo de tráfico fuera de los barrios residenciales en la medida de lo posible, se decidió crear un nuevo plan de circulación. Con el fin de asegurarse de que todo el mundo está de acuerdo y de que se tienen en cuenta las necesidades de la comunidad, el municipio también planeó involucrar continuamente a los residentes en el proceso.

“Si dejamos el coche en casa y cogemos la bicicleta más a menudo, creamos un entorno más seguro y habitable”.

Comisario de Movilidad Raf Van Roeyen

Mantener un tráfico ligero en los barrios

Beveren lanzó su proyecto de participación en la primavera de 2020. La administración ya había creado algunas propuestas para el nuevo plan de circulación del barrio y quería presentarlas a sus residentes. En épocas anteriores a la crisis, el municipio podría haber organizado una sesión informativa tradicional, pero esta vez optó por una plataforma digital.

En la primera fase, la junta siguió un proceso de tres pasos. En primer lugar (1) determinaron los objetivos principales del proyecto. En segundo lugar (2) crearon un grupo de discusión para invitar a expertos, concejales, juntas consultivas, comités de vecinos e incluso la Unión Ciclista. Esta fase también incluyó la creación de un mapa de cuellos de botella que trazaba las principales áreas problemáticas. En tercer lugar (3), las aportaciones de la segunda fase se analizaron a fondo y se tradujeron en posibles medidas para cada subárea.

Y esto era sólo el principio. En la fase 4 se presentaron al público las medidas propuestas. Suavizar las calles retirando el asfalto, instalar puertas para tractores, impedir el tráfico con pivotes: todas las posibles soluciones para mantener las zonas residenciales sin tráfico. Entre el 27 de junio y el 14 de agosto de 2020, los residentes tuvieron la oportunidad de votar y comentar las medidas que consideraban más eficaces. Basándose en las aportaciones de los residentes, el consejo formuló una nueva propuesta en la fase 5, la fase política.

Resultados

La fase de consulta más amplia tuvo lugar en verano. La plataforma atrajo nada menos que a 2.800 visitantes únicos, de los cuales 1.010 se registraron en la plataforma. En conjunto, compartieron más de 700 comentarios y votaron 2.500 veces, lo que supone una media de 150 votos y 40 comentarios por medida propuesta.

¿Digno de mención? El 18% de los participantes, es decir, casi 1 de cada 5, tenía menos de 30 años. Parece que los jóvenes de Beveren consideran que un entorno poco transitado es extra importante.

Conclusión e implementación

A lo largo del proceso de participación, se pusieron sobre la mesa 17 medidas. Basándose en las aportaciones de los residentes en las distintas fases de participación, se redujo a un plan con 13 intervenciones, que se irán implantando gradualmente en 2021. El municipio mantendrá a los residentes informados mediante cartas y publicaciones en las redes sociales.

Además de su alto nivel de participación y de la fluidez del proceso, este proyecto también ha traído consigo un cambio de mentalidad, afirma el Comisario de Movilidad, Raf Van Roeyen. “Estos últimos meses nos han enseñado una cosa: los residentes están redescubriendo el valor añadido de las rutas en bicicleta y a pie en nuestras zonas residenciales. Dejando el coche en casa y cogiendo la bicicleta más a menudo, creamos un entorno más seguro y habitable.”

¿Qué es lo que sigue?

Tras el éxito de la aplicación del nuevo plan de circulación, la plataforma acogerá una serie de nuevos proyectos. Una primera encuesta sobre la reconstrucción de la Spoorweglaan ya atrajo a más de 200 participantes en la primavera de 2021.


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